Fabricantes desde 1907, Marie Claire se renueva sin renunciar a ser un clásico. Su amplísima gama de productos requiere de una personalidad reconocible para diferenciarse en un entorno competitivo. Referente nacional en el sector de pantys y calcetines, Marie Claire ha puesto en marcha un plan estratégico entre cuyas acciones se enmarca el rediseño de la marca y el packaging.

‍El logotipo transmite simultáneamente tradición y modernidad gracias a la combinación de formas clásicas con rasgos singulares y serifas puntiagudas. Construido a partir de la tipografía Cirka, las letras han sido modificadas por el diseñador Andreu Balius para enfatizar rasgos terminales, equilibrar barras horizontales y ajustar el espaciado. El packaging comunica solvencia y compromiso a partir de la rigurosa jerarquización de la información y un lenguaje fotográfico que trata a la mujer como sujeto y no como objeto.  El cambio de color de los fondos responde a la necesidad de diferenciar las líneas de productos.